Desde el 2013, Adele está trabajando para perder peso y llevar una vida más saludable, iniciativa que la ha llevado a bajar 68 kilos. Aunque por mucho tiempo declaró que su físico no le generaba un problema, aceptó que en el momento en que afectara su salud, buscaría bajar de peso. Getty
El drástico cambio en la apariencia de la intérprete ha generado polémica en redes, pues algunos usuarios señalaron que Adele ya era una persona digna de reconocerse y poner el nombre de las mujeres en alto, ya que tiene una voz envidiable y ha ganado decenas de reconocimientos, incluyendo un premio Oscar y varios Grammys, y que su pérdida de peso no debería ser la única razón por la que se hable de ella. Crédito: Getty